Por una vez, este escrito no es mío (¡ya se nota!). Es de Roberto Fontanarrosa, eximio humorista argentino, autor de numerosos y deliciosos cuentos, como este mismo, y de buena parte del repertorio cantable de Les Luthiers.
Este cuento me gustó mucho, pero me di cuenta de que un español se perdía la gracia por tener que andar traduciendo, aunque fuera mentalmente, del idioma argentino corriente, y sus giros lingüísticos al español vulgar. Así que me decidí a traducirlo, y ya de paso y con ayuda de unos amigos, lo grabé, que algunos relatos se prestan especialmente a ser escuchados antes o mejor que leídos.
Espero no haber cometido un desatino, ha sido con buena voluntad.
ahora no puedo escucharlo, pero me atrevo a asegurar que no ha sido ningún desatino, sino un homenaje a un grande como el negro Fontanarrosa
Hola Oz! El otro día murió Benedetti…así que ya puedes presumir de número 1 jeje.
Un abrazo
Excelente Oz !!! ,y en la voz de ustedes un gran homenaje a nuestro negro Fontanarrosa …
por fin pude escucharlo… te quedó estupendo…qué difícil es ser hombre…
(buena la traducción: está contigo… perdón, pero el barrio es el barrio… jejeje muhbiehlatía… que te cagah.. jejeje)
Yo creo que a losotroh nos da más risa escucharlo en español de HEspaña.
¡Bien… che… muy bien! Bravo por los actores.
La traducción muy buena.
«El Negro» seguro que también se ríe y lo disfruta desde arriba 🙂
Buenísimo, al final me dió el sueño escuchando a sepúlveda.