Mínima mujer

Tú, mínima mujer, por la rendija
asomas el hocico de raposa
al más mínimo olor de cualquier cosa
que aproveche tu afán de sabandija.
.
Si se pierde un billete… ya has barrido.
Si sucede un milagro… ¡fue tu rezo!
Si el guiso sabe bien… ¡por tu aderezo!
Mas si algo se estropea… tú no has sido.
.
Cronista pertinaz del vecindario,
de la cola del pan gacetillera,
y siempre casualmente la primera
en identificar al perdulario.
.
Eres la que reparte credenciales,
la que separa el trigo de la paja,
la que corta a medida la mortaja
y la que siembra los berenjenales.
.
Si la costurerita da un mal paso
tú eres la que le echó la zancadilla.
La que me atizará en la otra mejilla,
a poco que le haga cualquier caso.
.
Brillante cual estrellas diamantinas,
punto central de cuantos te rodean,
y te adoran y te vitorean,
eres más popular que las gallinas.
.
Eres tan importante que ni un perro
se pondría a ladrar sin tu permiso.
Eres tan importante que el occiso
iría a saludarte en el entierro.
.
¡Cuán se te añoraría en cualquier parte!
¡Qué serían sin ti las sociedades!
¡Y qué harían sin ti tus amistades!
…pues darse media vuelta
y olvidarte.

TG ©

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